Tanto Julen Agirrezabala como el Athletic Club son conscientes de que Unai Simón es una figura inamovible en la portería rojiblanca. Ibaigane es consciente de la proyección de Agirrezabala, por lo que urge una salida que le brinde los minutos para seguir creciendo.
Ernesto Valverde sigue manteniendo fijo a Simón, obligando a buscar a Agirrezabala a algún equipo de LaLiga donde no solo goce de minutos, sino también de experiencia en la máxima categoría. Por fortuna para todas las partes, el mercado de enero puede brindar la solución.
Una marcha que sería en condiciones muy estrictas: cesión sin opción a compra. La plena confianza bilbaina en el internacional sub-21 obliga a un control que impida perder a uno de los grandes valores de la plantilla.
