Siempre se ha dicho que cada vez que habla Javier Clemente sube el pan y en una reciente entrevista el de Barakaldo no ha decepcionado ni a admiradores ni detractores. Una de sus habituales proclamas es la defensa de la filosofía del Athletic y los fuertes vínculos de la tierra, abocándole a elegir en un mercado cerrado.
Esta vez la pregunta hacía alusión a las implicaciones políticas a lo que respondió con un «no, claro que no es nacionalismo».
El ex seleccionador español entronca la filosofía rojiblanca con un espíritu localista que defiende retener el talento que se genera en la tierra , sosteniendo que «simplemente damos vida. Nuestra juventud, nuestro pueblo tiene fuerza para sacar adelante un equipo. El público sabe que los jugadores son vecinos. Preferimos entrenar a nuestros niños, chavales que nacen y ya quieren ponerse esa camiseta. Sabemos que fuera hay mejores jugadores, pero si los trajéramos, quitaríamos la ilusión a los nuestros. No tiene que ver con el nacionalismo. Muchos no son nacionalistas. También, en otros ámbitos, intentamos que los más listos no se vayan de Euskadi. Algunos lo hacen porque están a otro nivel y aquí no pueden colmar sus ambiciones profesionales. Vale, claro que lo entiendo, pero me gustaría que los médicos y los ingenieros fueran de aquí».
El barakaldés incluso reconoce que, a pesar de lo difícil de aquellos años, su condición de seleccionador español no supuso menoscabo alguno para su vida social en Euskadi y en cambio la suya de nacionalista vasco confeso si lo supuso en el resto de España, reconociendo que su rol de míster de la selección no aumento su implicación con el combinado rojo: «Era el mismo que tenía antes y el mismo que tengo ahora. Respeto mucho a la gente de todos los sitios. Cuando fui, dije en público: “Soy nacionalista vasco”. Eso no significa que fuera antimadrileño ni antinada. No puedo ver a los tontos de un lado y de otro».