
Siempre que haya nacido o se haya formado en Euskal Herria, cualquier talento es susceptible de ser captado para Lezama. Desde el trabajo de ojeadores descubriendo joyas por pulir, hasta clubes que demandan la atención de Lezama sobre uno de sus jugadores. El Athletic vive en un estado de constante vigilancia, sabiendo que su futuro depende de la necesitad de encontrar talento cercano.
Uno de los yacimientos habituales suele ser Tajonar, la cantera de Osasuna. No pocas veces canteranos circulan en una y otra dirección. Esta es una ocasión en la que la ruta es de Pamplona a Bilbao.
Diario de Navarra hace saber que Adrián Sieiro, infantil de los rojillos, pasa a terminar su formación en las instalaciones de Lezama. Son ya tres en un año los jugadores de la categoría que dejan atrás su pasado pamplonica para emprender la aventura bilbaína.
Como era de prever, la marcha de este habitual de la selección navarra no ha sentado bien en la dirección de Osasuna. Su condición de promesa en firme hace que la pérdida sea más dolorosa para los rojillos y con ello se tensa más la relación entre los clubes.