El Real Madrid volvió a beneficiarse por una decisión arbitral el sabado en San Mames. El arbitro aragonés Jaime Latre, permitió que el centrocampista del Real Madrid, Casemiro, pudiese acabar el encuentro.
Casemiro, decisivo en la victoria en el partido del Athletic Club y el Real Madrid en San Mamés, no tendría que haber acabado el encuentro si el arbitro hubiese aplicado el reglamento.
El jugador blanco marcó el segundo gol del Madrid, pero este jugador no debería haber estado en el campo cuando se produjo esa jugada.
Casemiro no vio la tarjeta amarilla por una tremenda entrada a Iñaki Williams en el minuto 23. Hubiese sido una tarjeta que le habría condicionado todo el partido. No obstante, al no tener ninguna amonestación siguió jugando hasta que en el minuto 30, una dura entrada al «zorro» Aduriz vio la amarilla.
