Ambiente enrarecido en el seno del Athletic Club, que esta temporada construyó un proyecto que apostaba por reverdecer viejos laureles con el retorno de Ernesto Valverde al banquillo de San Mamés. Los últimos resultados han supuesto un vuelco en las esperanzas bilbaínas ya que al comienzo de temporada el técnico, el capitán y el presidente, pusieron como objetivo alcanzar Europa.
No es ningún secreto que la reciente racha de malos resultados está muy por debajo de las expectativas tanto de dirección como de afición y otro año más de ausencia de Europa se ve como una catástrofe. La preocupación recorre todos los estamentos rojiblancos, más a sabiendas de que para mantener las opciones de la Conference League los leones deben imponerse al Real Madrid en el Bernabeu y esperar a que Osasuna falle.
Al director deportivo del Athletic se le ha preguntado hoy en rueda de prensa por la continuidad de Ernesto Valverde, que tiene firmado una temporada más con la directiva de Jon Uriarte. Mikel González ha quitado importancia a esos rumores y ha confirmado que el de Viandar de la Vera seguirá una campaña más. «Ernesto Valverde es nuestro líder del primer equipo. Es nuestro entrenador. Creemos en él a muerte. Creemos en el trabajo que está desarrollando y creemos en el trabajo que va a desarrollar. Le veo con más fuerza que nunca. No tenemos ninguna duda».
Pero de no obtener una plaza europea el destino de Valverde tras el cierre de la temporada podría estar en duda. El entrenador es consciente del «run run» de la grada hacia su figura. De repetirse otra temporada similar a la actual, la situación puede ser insostenible para Valverde, que podría ver con buenos ojos rescindir su contrato este verano antes de salir la próxima temporada por la puerta de atrás.
